Jugó, venció, meó, perdió.
El analisis delató efedrina y Maradona acabó de mala manera su mundial del 94.
La efedrina, que no se considera droga estimulante en el deporte profesional de los Estados Unidos y de muchos otros paises, está prohibida en las competencias internacionales.
Hubo estupor y escándalo.
los truenos de la condenación moral dejaron sordo al mundo entero, pero mal que bien se hicieron oir algunas voces de apoyo al ídolo caido.
Y no solo en su dolorida y atónita Argentina, sino en lugares tan lejanos como Bangladesh, donde una manifestación numerosa rugió en las calles repudiando a la FIFA y exigiendo el retorno del expulsado.